viernes, 31 de mayo de 2019

2º grado : 




Tras creer que la luna se cayó sobre el tejado, los animales deciden ir en busca de ella. Un burrito le pide ayuda a un chivo, que le pide ayuda a un perro, este a un gato, y este a un pato. El granjero aclara el mal entendido: lo que creían que era la luna es un melón, puesto a secar al sol. De todos modos, esta cooperación entre todos permite que esa noche haya dos lunas: una sobre el techo y otra sobre el cielo. La prosa poética se desliza con encanto: Din don, campanón, se hamacaba el melón; La luna se ha descolgado y buen trabajo nos ha dado; ¡Firuletes!

No hay comentarios:

Publicar un comentario